La cueva decorada de Bernifal se sitúa en el pueblo de Meyrals, en el departamento de Dordoña, en la cuenca del río Vézerè, en una comarca que guarda una de las mayores concentraciones de arte rupestre del mundo. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979, dentro del conjunto Sitios prehistóricos y cuevas decoradas del valle de Vézerè.

Está a una altura de unos 50 metros sobre el fondo del valle, a unos 500 metros de la carretera actual.

En 1902 se descubrieron en sus galerías 110 imágenes grabadas y pintadas, está legalmente protegida desde 1904. La cueva no ha sufrido vandalismo, por lo que las figuras se encuentran en un muy buen estado, aunque muchas están cubiertas de calcita de una forma natural, lo que dificulta la identificación de algunas imágenes.

La entrada original está bloqueada por un desprendimiento natural de rocas, la boca actual es estrecha y difícil, lo que también ayuda a proteger las representaciones.

Es una larga galería en la que se abren tres salas, la mayoría de las representaciones están en la segunda sala, la que presenta una menor acumulación de calcita y la menos húmeda. Predominan por número las  figuras grabadas, ejecutadas con surco muy profundo, pero también hay pinturas rojas y negras, la pintura se ha utilizado sobre todo para los signos.

Entre los animales representados, predomina el mamut, también hay caballos, bóvidos, ciervos, un supuesto oso, tres supuestas manos y unos cincuenta signos, entre los últimos, tectiformes característicos del valle del Vézerè, signos en forma de tejado hechos con estampados geométricos formados por puntos.

Bernifal estuvo ocupada desde hace unos 15.000 hasta hace unos 10.000 años, durante la mayor parte del Magdaleniense, las representaciones parecen hechas en esa misma época.