Gabillou se encuentra en la región de Dordoña, se sitúa en el valle de Isle, cerca de la comuna de Mussidan. El arte rupestre se descubrió en 1941, cuando se construía un almacén para una casa privada. La entrada de la cueva quedó destruida por el uso dado desde la Edad Media y ese almacén impide la entrada a la misma.
El doctor Jean Gausse, un erudito de la Prehistoria, compró la cueva en 1941. Se hacen tres o cuatro visitas al año a ella.
Es una cueva corredor de unos 30 metros, a lo largo de ella se abren espacios parecidos a pequeñas salas, de 50-60 centímetros de altura, las figuras están en sus techos y paredes.
Las figuras son grabados, aunque se ven restos de ocre rojo y manchas negras. Se han identificado más de 200 representaciones, hay diferentes tipos de caballos, uros, bisontes, renos, mamuts, cabras monteses, felinos, osos, liebres, diversos animales indeterminados y signos.
Sin embargo, el elemento característico de Gabillou pueden ser las figuras antropomorfas, sobre todo por la rareza del tema en el arte rupestre paleolítico. Se han identificado hasta cuatro figuras humanas, pero las más significativas son el “brujo de Gabillou” y la “mujer del anorak”.
El “brujo” es una figura de unos 25 centímetros de alto, tiene las piernas y el torso que lo identifican como antropomorfo, cuernos y barba en la cabeza, dándole aspecto de bisonte. Este tipo de imágenes se identifican como brujos o chamanes que se valían del espíritu de los animales para realizar un ritual.
La “mujer del anorak” es una figura grabada femenina que aparece cubierta por una especie de chaqueta y capucha.
Aunque las teorías sobre la fecha de las figuras han ido cambiando, pueden ser de hace 22.000-17.000 años, del Solutrense o principios del Magdaleniense.